Una solución para cuando tenemos
invitados que comen carne
He usado estos calabacines redondos que están apareciendo en algunas tiendas, por ejemplo Lidl. Si no los habéis probado, os invito a hacerlo porque son dulces y carnosos, con muy pocas semillas.
- Cortar una tapita a cada calabacín y vaciarlos dejando 1/2 cm de pulpa. Salarlos y cocinarlos 2-3 minutos en el microondas con las tapitas puestas. Retirar y dejar boca abajo sin las tapas, a temperatura ambiente.
- Picar unos cuadrados de tofu ahumado (medio por cada calabacín), una o dos zanahorias y un pimiento verde italiano en trocitos pequeños.
- Poner aceite en una sartén amplia y echar el tofu, rehogar hasta que se encoja, bañar con salsa de soja y remover hasta que la absorba.
- Sin retirar el tofu, añadir más aceite y rehogar las zanahorias y el pimiento junto con la pulpa de los calabacines en trozos grandes y un diente de ajo bien picado.
Cuando la pulpa se ablande, machacarla un poco sin deshacerla del todo.
Apagar el fuego cuando la zanahoria esté tierna pero aún crujiente.
- Añadir al relleno sal (si la necesita, porque la salsa de soja ya la contiene), pimienta, piel de limón rallada y albahaca seca.
- Rellenar los calabacines y ponerlos en una cazuela para horno sobre un lecho de tomate fresco troceado, con las tapas aparte. Hornear 15-20 minutos.
- Ponerles las tapas y servir con arroz blanco, los tomates y unas hojas de albahaca fresca, todo rociado con aceite de oliva.
Cocina vegetariana
