jueves, 1 de mayo de 2014

Fricasé rústico de "pollo de soja" con espárragos




En el fricasé tradicional, la salsa no lleva espárragos y se tamiza antes de espesarla con la maicena. Esta versión es menos elegante pero les da más sabor a los medallones de soja.

Ingredientes

- 250 g de medallones de soja
- 1 cebolla mediana
- aceite de oliva
- 1 taza de vino blanco
- 1 cucharada de maicena
- 1 cucharada de zumo de limón
- 1 chorro de nata vegetal
- sal, pimienta y nuez moscada
- semillas de apio (o 1 vara de apio fresco)
- salvia fresca

- arroz blanco para acompañar


Preparaciones previas

Medallones de "pollo de soja". No es pollo pero dan el pego y son proteína completa.
  • Para aprox. 250 g: mezclar 3 cucharadas de harina de soja, 2 cucharadas de copos de avena gruesos, 1 cucharada de harina de trigo y 2 cucharadas de gluten (las cucharadas son colmadas). Añadir poco a poco el agua necesaria para hacer una masa, estirarla en rollos, trocear y aplastar de forma irregular con los dedos.

 

  • Cocerlos suavemente en agua hirviendo 5 minutos desde que suban a la superficie. 
  • Escurrir y dejar enfriar.

Espárragos: desechar las puntas leñosas, cortar las yemas y cocerlas tapadas de 1 a 2 minutos en el micro, trocear los tallos tiernos.

Arroz: hervirlo en agua con sal, escurrir y añadir aceite.


El plato

  • Rehogar suavemente en aceite de oliva la cebolla trinchada y los medallones de soja. Cuando comiencen apenas a tostarse, añadir los tallos de espárrago y remover 2 minutos más.



  • Poner sal, pimienta, nuez moscada y las semillas de apio (o añadir una vara de apio picado al rehogado).
  • Incorporar el vino y dejar cocinar destapado y a fuego lento unos 15 minutos.
  • Añadir la maicena disuelta en 1/2 taza de agua fría y cocer 3 minutos más, removiendo.
  • Añadir el zumo de limón y la nata, mezclar y dejar que se caliente sin hervir.
  • Repartir unas hojas de salvia troceadas con las manos y apagar el fuego.
  • Servir con el arroz y las puntas de espárrago rociadas con aceite.



Nuestra salvia en flor, con los mimos de su jardinero particular


 Como gladiolos en miniatura