viernes, 11 de noviembre de 2016

Crema de garbanzos con kale y algas


Así da gusto ir a la moda

Esta receta es una larga evolución de una que vi hace tiempo en la televisión italiana. En aquel caso la verdura era escarola y en vez de algas llevaba sardinas. Además de la veganización, resultó que no tenía escarola pero sí media bolsa de kale. Y me dije oye, pero si esto es muy trendy, cool e incluso hipster, ¡justo para fardar en el blog! Y salió estupendo, diferente, elegante, barato... y también trendy, cool, etc. y muy sano.



Los garbanzos: en este caso eran de bote, 400 g netos para 3 raciones.

Las algas: compradas en un supermercado chino. Fieles a su tradición, no especifican qué tipo de alga es, pero sabe a nori. Puedes usar cualquiera, pero no omitirlas porque son decisivas para el resultado final.







El kale: la verdura de moda, la que no falta en ningún batido verde que se precie, si no la tomas te enfermas y si no la conoces estás totalmente out, osea. 
Es una col rizada, tiene muchas propiedades y sabe a cosa nueva. Merece la pena probarlo.
La bolsa de 200 g sale por unos 2 € (Mercadona).







La preparación es facilísima:


  • Escurre y aclara/enjuaga bien los garbanzos. Ponlos en una sartén grande con un fondo de aceite de oliva y un diente de ajo entero. Rehógalos lentamente hasta que el ajo esté cocido.
  • Cubre con agua hasta un dedo por encima de los garbanzos, añade romero seco (o una ramita de fresco, si tienes) y cocina 10 minutos.


  • Pon 100 g de kale en una sartén con apenas de aceite en el fondo y nada más. 
  • Tapa y cocina a fuego bajo, dándole la vuelta una vez, hasta que se ablande sin llegar a pocharse.




  • Retira con una espumadera la mitad de los garbanzos y resérvalos al calor. Retira también el diente de ajo y la rama de romero si la has puesto. 
  • Bate el resto de los garbanzos con el agua de cocción. Añade un pelín más de agua si es necesario, te tiene que quedar una crema bastante más densa que una sopa.
  • Sazona con pimienta y poco o nada de sal (ten en cuenta la que llevan los garbanzos y las algas).

  • Vierte la crema en platos hondos y pon arriba una buena cantidad de garbanzos.






  • Reparte unas cuantas tiras de algas sin remojar por todo el plato y acomoda en el centro un montoncito de kale (previamente salado si quieres, aunque te sugiero dejarlo tal cual).
  • Rocía con aceite de oliva crudo y sirve con bastones de pan integral tostado.