Se me ha ocurrido esta cosita y la verdad es que nos ha encantado. Cuesta muy poco en todo sentido, así que la podéis probar y, si no os gusta, ¡al compost!
Las cantidades son para un tarrito como de mermelada.
Quitar las pieles exteriores a 2 cabezas de ajo, lavarlas y ponerlas enteras en el microondas con un trozo de jengibre de 3-4 cm cortado en rodajitas. Cocinar 1 minuto a potencia máxima. Retirar los ajos, refrescarlos y pelarlos.
- Poner en un cazo pequeño 120 ml de vinagre blanco, la misma cantidad de agua, 2 cucharadas de azúcar, un pellizco de sal y bayas de pimienta de Jamaica (allspice), pimienta verde y pimienta roja. Hervir 1 minuto a fuego fuerte.
- Echar el jengibre y cocinarlo 5 minutos, añadir los ajos pelados, dejar que retome el hervor y apagar el fuego.
- Guardar tapado en la nevera y esperar como mínimo una semana antes de consumirlo, hasta que el líquido se oscurezca un poco y los ajos queden veteados de marrón. Si os aguantáis dos semanas, mejor que mejor.
Van muy bien como aperitivos con quesos, pan y verduras crudas.