El otoño se merecía un paseo por el bosque con el cestito para recoger setas silvestres, pero lo he tenido que cambiar por la bolsa del súper y unas gírgolas cultivadas. Dicen que no es más feliz quien más tiene sino quien menos desea, y algo de eso habrá porque a mí este plato me ha encantado.
La receta es muy sencilla: una masa de puré y harina, un relleno de setas salteadas y un rato de horno. Con esto ya alcanza, pero si quieres puedes mirar el paso a paso.
Receta para 6 tortas
- Pon 750 g de patatas peladas a cocer al vapor.
- Mientras se cuecen las patatas, corta 500 g de gírgolas (pleurotus) en trozos de 2-3 cm y rehógalas en una sartén ancha con 2 cucharadas de aceite de oliva.
Cuando se hayan encogido y comiencen a tostarse, sazona con sal, pimienta y 2 dientes de ajo picados.
Déjalo al fuego hasta que el ajo se cocine, apaga y añade perejil fresco picado.
- Cuando las patatas estén hechas, retíralas y pásalas por el utensilio para hacer puré, recogiéndolo en un bol grande.
Añade 1 pellizco de sal, 1 cucharada de aceite de oliva, 4 cucharadas colmadas de harina para rebozar sin huevo y 1 cucharada colmada de harina de garbanzos. Mezcla solamente hasta unir los ingredientes y deja templar.
Te tiene que quedar una masa suave y manejable. Si la notas muy blanda o pegajosa, añade un poco más de harina pero que sea realmente poca.
Las masas de patata y harina no se deben trabajar mucho porque entonces la patata suelta agua, hay que añadir más harina y se endurece la masa.
- Cuando la masa se enfríe lo suficiente para poder manejarla, ponte dos cucharadas en la palma de la mano, ahuécalas y rellena con una cucharada abundante de setas.
- Truqui: separa dos cucharadas de masa en el fondo del bol y aplástalas con la cuchara contra la curva donde comienza a subir la pared (parte sombreada en la foto). Te quedará cóncava y podrás utilizarla para tapar la torta.
- Retira la tapa con la cuchara y cubre el relleno.
- Aprieta la bola con las dos manos para compactarla y hazla rodar entre las palmas para darle buena forma.
- Aplasta la bola sobre la encimera y alísale los bordes, pásala por pan rallado de ambos lados y ponla en una placa de horno aceitada.
- Rocía las tortas con un hilo aceite de oliva, espolvoréalas con otro poco de pan rallado y cocínalas en el horno precalentado a 180 ºC durante media hora o hasta que estén suavemente doradas.
- Sírvelas con otro hilo de aceite y espolvoreadas con más perejil y unas almendras machacadas.