Sugerencia de degustación: primero comerse el picante con el tenedor
e, inmediatamente después, el montadito entero
e, inmediatamente después, el montadito entero
Como otras legumbres, los altramuces se pueden utilizar como bases de pastas y cremas de untar.
La idea se me ocurrió cuando retiré del frigorífico un poquito de salsa de altramuces y pimientos que había sobrado el día anterior, y vi que se había moldeado.
De ese descubrimiento salieron estas dos cremas untables y sospecho que, con el tiempo, vendrán unas cuantas más. El sabor de los altramuces es especial y se deja sentir incluso en presencia de ingredientes fuertes como las aceitunas.
La roja es casi igual a la salsa del otro día:
- 4 cucharadas de altramuces
- 2 pimientos de piquillo (o morrones pequeños) enlatados
- 1 cucharada abundante de jugo de los pimientos
- 1 chorrito de aceite
- un ramito abundante de melisa (y en este caso también le puse albahaca)
La verde lleva:
- 4 cucharadas de altramuces
- 2 cucharadas de aceitunas verdes
- 1 chorrito de aceite
- 1 chorro del agua de las aceitunas (o más si hace falta)
- un poco de piel de limón rallada
- 1 ramito de perejil fresco, solo hojas
se dejan enfriar bien en el frigo... y se descubre que no han quedado bien moldeados, el rojo más o menos pero el verde no aguanta.
Hijos míos, aprended de mis errores |
Visto lo cual, decidí servirlos en minimontaditos acompañados de un toque picante: el paté de aceitunas con un pimientito piri-piri (son mis bombones, picantitos pero deliciosos y ¡tan bonitos!) y el de pimientos con un trocito de guindilla "vasca", mejor de las más suaves (estas que os muestro no pican casi nada, son de Supermercados Del Río).
Seguiré probando hasta que queden firmes, no falta mucho.
¡Espero que os hayan gustado y que me contéis vuestros experimentos!
TiP
Conviene desalar un poco los altramuces, cambiándoles varias veces el agua.
Agradecimientos
- A Paperina de Papercrafteros por los hermosos moldecitos (os invito a ver en su blog cuántos sueños se pueden hacer realidad con papel, imaginación y habilidad), la próxima vez procuraré tratarlos como se merecen.
- A Pastas Gallo por los platitos y tenedores con los cuales nos hicieron degustar los nuevos raviolis y tortellini Gourmet, que me resultaron totalmente decepcionantes. Por suerte me quedé con los platitos, me dan ganas de llorar por los que han tirado a la basura.
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