Seguimos con los hinojos, que por suerte se consiguen
cada vez en más sitios y de mejor calidad
La cocina te da sorpresas: este plato tiene casi los mismos ingredientes que la Ensalada de hinojo y naranja con vinagreta de tomates secos y semillas de alcaravea, pero el resultado ha sido completamente diferente. Como en la vida, la cuestión no es solamente el "qué" sino también el "cómo".
Para dos raciones de plato único
- Rebánale la base oscura a un bulbo de hinojo (o medio si es muy grande) y quítale las hojas exteriores si están duras. Pártelo por la mitad a lo largo y córtalo en tiras muy finas.
- Pon las tiras de hinojo en una ensaladera con los gajos de una naranja pelada a sangre (al vivo).
- Bate cuatro tomates secos (previamente remojados si están muy duros) con aceite de oliva y vinagre de vino tinto, y echa esta crema a la ensaladera.
- Añade una cucharadita de chalota seca y unas semillas de alcaravea o de hinojo.
La chalota seca es de la marca Ducros. La recomiendo con entusiasmo, sobre todo para las vinagretas. Se rehidrata en agua y tiene todo el aroma de la hortaliza fresca. En este caso, el remojo se hace con los jugos de la ensalada. - Deja en reposo media hora como mínimo, removiendo de vez en cuando.
- Mientras tanto, corta dos tomates pequeños por el ecuador, vacíalos con una cucharilla y déjalos escurrir boca abajo.
- Bate lo que has sacado de los tomates con seis aceitunas negras deshuesadas y el hollejo de la naranja. Rellena los tomatitos con esta crema de aceitunas.
- Sirve la ensalada de hinojo con los tomatitos rellenos y arroz blanco templado, condimentado solamente con aceite de oliva.