Estas empanadillas también estuvieron en el Día Mundial del Veganismo, como los pinchos de bolitas de arroz y las empanadillas de calabaza y brócoli. Ya falta menos de un año para volver a celebrarlo y, mientras tanto, ¡cada día somos más!
Para 16 empanadillas de 15 cm de diámetro
- Pon una bolsa de 1 kg de espinacas congeladas en porciones en una sartén grande con un hilo de aceite de oliva. Déjalas a fuego moderado hasta que se descongelen y pierdan el agua.
- Cubre el fondo de otra sartén con aceite de oliva y rehoga 1 cebolla grande picada fina.
- Echa en la sartén de la espinaca: la cebolla rehogada con su aceite, 2 puñados de garbanzos pequeños cocidos, 1 puñado de uvas pasas, 1 puñado de pipas de girasol, 1 cucharada abundante de levadura dietética en escamas y 1-2 puñados de soja texturizada fina. Mezcla bien y deja que la soja y las pasas se hidraten. No tiene que quedar nada de líquido suelto, si te queda algo, agrega una cucharada de fécula de maíz o de arroz.
- Añade nata de soja solamente para ligar (1-2 cucharadas) y sazona a tu gusto con: jugo Maggi, ajo en polvo, nuez moscada, 1 cucharadita de vinagre balsámico, 1 cucharada de salsa de soja, 1 cucharada de pimentón, 1 cucharadita de comino, sal y pimienta.
- Deja enfriar el relleno en el frigorífico.
- Rellena obleas para empanadillas que no contengan grasa animal, por ejemplo las de la marca Trigal que vende Alcampo. Píntalas con margarina vegetal derretida donde hayas disuelto una pizquita de cúrcuma, azafrán o colorante y cocínalas en horno precalentado a 200 ºC hasta que estén doradas.
También las puedes hacer más pequeñas para el aperitivo.